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El atacante brasileño Neymar asoma como una de las nuevas joyas en ciernes del fútbol tras su espectacular debut en el Sudamericano Sub-20 de Perú-2011, donde convocó todas las miradas tras anotar los cuatro goles con que Brasil venció a Paraguay en su estreno en el Grupo B.

A sus 18 años, Neymar da Silva Santos, llenó los ojos de los casi 18.000 espectadores que colmaron las instalaciones del estadio Jorge Basadre de Tacna (sur, fronteriza con Chile), que festejaron de pie los goles del hábil jugador con los puños apretados y los brazos extendidos como si fueran propios.

La exhibición que ofreció Neymar, quien cumplirá 19 años este 5 de febrero -en pleno Sudamericano-, colmó también las expectativas de una decena de agentes FIFA y de representantes de cuatro clubes del calcio italiano presentes en el estadio.

Neymar confirmó el cartel del que llegó precedido a Perú por la prensa brasileña, que lo describe como la más reciente 'joya' salida de esa verdadera cantera de figuras en que se ha convertido el Santos, su club actual.

Gambetas, velocidad, cambio de ritmo, dominio de ambos pies, potencia en el disparo y gol fueron algunas de las cualidades que sacó a relucir el desequilibrante Neymar, un muchacho de físico esmirriado, de impactantes ojos claros y peinado a lo 'mohicano'.

Estamos ante un crack en ciernes, ciertamente, que se divierte cuando controla el balón y que le ha devuelto el 'jogo bonito' a Brasil, que incluso celebró a ritmo de samba el primero de los cuatro goles ante Paraguay (4-2) el lunes.

Neymar, goleador del sudamericano tras la primera jornada, parecía actuar para las tribunas por momentos, como sospechando que su sola presencia en el terreno convocará el interés de equipos europeos para lograr su transferencia a esas ligas. De hecho los rumores apuntan a Inglaterra donde se menciona al Manchester United y al Chelsea.

"Brasil saber meter goles, jugamos muy bien ante un excelente equipo paraguayo que fue nada fácil de superar. Estoy muy feliz" con el resultado, dijo Neymar luego del partido en el que evitó destacar su actuación por encima de la del resto de sus compañeros.

El entrenador de la sub-20 de Paraguay, el argentino Adrián Coria, buscó poner algo de paños fríos a la "neymarmanía" que ya se vive en Tacna, aunque sin dejar de alabarlo: "La diferencia del partido la hizo el colectivo brasileño, no solo Neymar. Este es un equipo bárbaro con un jugador excepcional, con condiciones técnicas terribles".

"Si no ocurre algo extraño Neymar dará que hablar en los siguientes años. Ahora Brasil debe demostrar si es Neymar o si es, por el contrario Neymar más 10 jugadores", dijo de su lado el periodista Alberto Beingolea del canal deportivo local Cable Mágico.

"Ya Neymar asoma como la gran figura del Sudamericano", acotó el analista.

"Así no más no se ve en un debut sudamericano que alguien marque cuatro goles en un torneo juvenil", dijo el ex jugador peruano Tito Drago, presente en el estadio de Tacna.

"Quienes vieron esta noche (el lunes) a Neymar deben guardar de recuerdo su boleto de entrada al partido que disputaron Brasil y Paraguay", exhortaba por las ondas de Radio del Sur de Tacna, el locutor.

Neymar ha dicho a periodistas durante los entrenamientos que no le gustan las comparaciones, y menos con Pelé, el ícono del fútbol mundial y de su club Santos. Sin embargo no le disgustan las alusiones a Garrincha, el notable alero derecho que brilló en Botafogo y la selección brasileña en la década de 1950 y la primera mitad de 1960.

Su reto es evitar la indisciplina que podrían marcar su incipiente carrera como ocurrió el año pasado en Santos donde provocó el despido del entrenador Dorival Júnior y que justificaron que el seleccionador auriverde Mano Menezes le dejara fuera de la convocatoria de la selección para los amistosos contra Irán y Ucrania.

De momento Brasil es una fiesta, rumbo al tricampeonato sudamericano que significaría acumular 11 títulos en su palmarés de la categoría.